El autor nace en la ciudad de Arecibo, Puerto Rico el día 23 de marzo de 1946. Su madre era Margarita Hernández Sánchez, hija del poeta “P.H. Hernández” y su padre José Antonio Rozas Matienzo, oriu...visualizza altroEl autor nace en la ciudad de Arecibo, Puerto Rico el día 23 de marzo de 1946. Su madre era Margarita Hernández Sánchez, hija del poeta “P.H. Hernández” y su padre José Antonio Rozas Matienzo, oriundo de la nación vasca, de un pueblo conocido como Carranza. Sus primeros estudios lo realizo en el Colegio San Felipe, en la ciudad de Arecibo, donde fue educado por monjas norteamericanas. Su escuela Superior la realizó en la Escuela Pública, Dra. María Cadilla de Martínez, la cual termino en dos años, apenas tenía 15 años. Entró al mundo de la universidad en ese mismo año 1973 donde tuvo el privilegio de conocer a grandes figuras que luchaban y luchan por la independencia de su patria, Puerto Rico. Tuvo el honor de conocer a Don Juan Antonio Corretjer y a Don Juan Mari Brass, es uno de sus capítulos de un movimiento conocido como el Movimiento Pro Independencia de Puerto Rico por sus siglas, MPI, organización que no existe en la actualidad. El segundo año de sus estudios fue llamado obligatoriamente por el Servicio de Reclutamiento de los Estados Unidos, para ser uno de los muchos hijos de esta patria condenado a invadir y asesinar otros pueblos, en este caso fue Vietnam. En una de muchas anécdotas, fue en una ocasión donde se negó masacrar una aldea de personas inocentes, esta situación, le costó 6 meses de cárcel, donde me recluyeron como una bestia, “nunca disparé contra un ser humano en esa nación, por el contrario, estuve en la prisión, por negarme a efectuarlo”. Los otro cinco meses me indultaron, con la condición de servir de señuelo (en inglés ellos lo llaman “point man”). Este es el soldado que va al frente de la patrulla para detectar a los supuestos enemigos. Existe una anécdota, en una ocasión cuando estaba a campo abierto, me encontré de frente con un soldado del Ejército de Vietnam del Norte, éste visualizó una bandera puertorriqueña en mi gorra, y con un gesto humanitario, me indicó que me retirara hacia atrás, (ellos conocían la condición colonial de la isla, y estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, habían estado en diferentes ocasiones en conferencias de estudiantes socialistas en Vietnam, esto me salvó la vida, estuve corriendo sin parar, cuando uno de los yanquis me preguntó, simplemente indiqué, que teníamos que retirarnos porque nos superaban en número; era mentira esa con el propósito de evitar una confrontación. Después de haber cumplido con los otros seis meses, le indique al capitán yanqui, que no me importaba nada, sobre los beneficios de veterano y deseaba regresar a mi patria, Puerto Rico, situación que accedió, sin antes indicarme, que era un hombre marcado, lo envié con un “carajo”, para los Estados Unidos y regresé a mi hogar. Posteriormente de este infierno dantesco, continué de noches mis estudios en la Universidad de Puerto Rico. Estando una actividad social, conocí a mi esposa actual, Lydia Ortega Maldonado, con la cual engendramos cuatro hijos, dos gemelos, una niña y el mayor de los varones. Los estudios los combinaba con una diversidad de trabajos. Después de un tiempo terminé en Ciencias Sociales con una concentración en Economía. Trabajé con diferentes compañías y después establecí mi propio negocio para poder mantener a mi familia, hasta el día de hoy que estoy haciendo los intentos de escritor y estoy recibiendo el llamado “Seguro Social”, (dinero que te quitan por años de trabajo), que es un tipo de impuesto.visualizza meno